Traveling Light

Reduciendo el espacio y mudándose a un rascacielos en Coral Gables desde Washington DC, una viajera del mundo abraza lo esencial y un espíritu asiático atemporal.

Los amigos, un clima adecuado para practicar deportes durante todo el año y el tiempo para dedicarse a actividades filantrópicas son solo algunas de las atracciones que llevaron a esta experta en medios a adoptar un hogar en Coral Gables. Las vistas al agua y al centro de Miami desde tres lados de su condominio en el piso 12 le dieron a esta remodelación un gran comienzo incluso antes de que Phyllis Taylor fuera contratada para asegurarse de que el diseño y la disposición funcionaran tanto para la vida cotidiana como para el entretenimiento de los familiares y amistades que visitaban desde todo el mundo.

Mudarse a un lugar más pequeño puede ser abrumador. Es por eso que Taylor ayudó a su clienta a revisar los artefactos que guardaba en su casa tradicional en Washington DC y que había recolectado en todo el mundo a lo largo de los años. Además, se enfocó en la preferencia de la clienta por las cestas, esculturas e ikebana africanas y asiáticas. Cada colección se editó escrupulósamente en varias sesiones. “Estaba comenzando un capítulo nuevo de su vida”, dijo Taylor. “Queríamos que se sintiera como un hogar, así que era fundamental que entendiéramos sus sensibilidades. Las cestas asiáticas no tienen mucho adorno, mientras que las africanas tienen formas y patrones. Así que decidimos usar ambas y ver el resultado”.

Las superficies inspiradas en el tejido de cestas incluyen una pared de paneles deslizantes de estructuras metálicas con revestimiento de madera flexible tejida a través de ella, que cierran la cocina cuando hay algún evento formal. El protector contra salpicaduras de mármol también se aplicó en forma de mosaico “tejido”. Los mostradores gruesos y las vigas en el techo inspiradas en el estilo japonés añaden una sensación de orden y permanencia. Sobre la mesa desayunadora, el techo con patrón de malla de madera vuelve a repetir la temática de las cestas y oculta la iluminación empotrada. “Si colocamos vigas pesadas, el techo que se extiende por sobre ellas parece flotar y hace que parezca más alto”, comenta Taylor. Las consolas de estilo asiático agregan color y la escala era perfecta para que sirvieran como los extremos de la isla. La campana de extracción, el refrigerador y congelador Sub-Zero y la placa de cocción Wolf de 36 pulgadas rompen la calidez de la madera con las líneas limpias del acero inoxidable. 

La dueña de casa quedó extasiada con su nueva cocina, donde prepara desde sus cenas festivas y sopas de bolas de matzah hasta platos latinos y cubanos. “Sub-Zero, Wolf, and Cove es la empresa con los mejores productos —no hay discusión”, dice Taylor. “Además, recomiendo encarar el diseño de una cocina teniendo ya una base muy sólida, un plan funcional, electrodomésticos y acabados y después divertirse con el diseño del protector contra salpicaduras, el estilo de los gabinetes, etc. ¡La eficiencia es hermosa! Es como un atuendo de fiesta: siempre se puede agregar joyería al final, pero sí o sí hay que encontrar el vestido negro básico adecuado para la ocasión antes que nada.

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